CAPITULO-18
En medio de la leve llovizna, yo estaba dando mi tradicional paseo de la tarde por el parque cuando vi que ellos, como de costumbre . Busquemos en el carrusel de caballitos es una buena posibilidad . Allí el perro acostumbraban esconder sus huesos y a veces se echaban una siesta cuando las aventuras amorosos lo habían dejado extenuado. No lo hagamos en desorden , pongamos le método Dividió el parque en cuadrantes , a cada uno envió un grupo con su correspondiente responsable. La gente había desaparecido. solo se oía el llamado a angustioso que hacían los demas muchachos con cierto cansancio y con menos esperanzas.